POSIBLE CURA BARATA Y ACCESIBLE, PARA EL CORONA VIRUS
Nuestra Red ha decidido compartir esta serie de cuatro artículos publicados recientemente, en secuencia de pocos días, por el Periódico argentino Clarín. Este es el de mayor tiraje en el país y de larga y reconocida trayectoria periodística. Informan sobre la posible cura de COVIC-19, barata y por lo tanto accesible para todos. Con ello deseamos dar mayor divulgación a esta esperanza y, a la vez, poner al descubierto los intereses político-económicos de siempre, que aquí están también en juego, aun frente a esta pandemia global. Construyan nuestros apreciados lectores y lectoras sus conclusiones al respecto. OLM
PANDEMIA GLOBAL“El tratamiento es eficaz, es inmoral no usarlo”, dice el infectólogo francés que afirma haber derrotado al coronavirus.
Didier Raoult hizo un ensayo clínico con un tratamiento que se usa para la malaria y tuvo resultados positivos. Comenzaron a aplicarlo en Niza. 24/03/2020 - 11:50 Clarín.com El Dr. Didier Raoult, el infectólogo francés que afirma, hace ya semanas, haber hallado un tratamiento efectivo contra el coronavirus. /AFPUn infectólogo francés está convencido que ha encontrado el tratamiento para derrotar al coronavirus. El profesor Didier Raoult considera que un tratamiento contra la malaria, basado en 600 mgs de hidrocloroquinina cada 12 horas, y un comprimido de Azitromicina por día, pueden derrotar la pandemia. El gobierno francés autorizó los ensayos clínicos en varios centros hospitalarios de Francia y el alcalde de Niza, Christian Strossi, contagiado, ordenó comenzar a aplicarlo en su ciudad.
Roualt es director del Instituto Mediterráneo de Infecciones, con base en Marsella, y el más eminente especialista mundial en enfermedades infecciosas transmisibles. Inició sus investigaciones con un ensayo clínico realizado en diez hospitales chinos en Wuhan, Pekín y Shanghái para evaluar la eficacia de la cloroquina en los tratamientos asociados al COVID-19. “Los resultados obtenidos hasta ahora con más de 100 pacientes han demostrado que el fosfato de cloroquina es más eficaz que el tratamiento recibido por el grupo comparativo para contener la evolución de la neumonía, mejorara el estado de los pulmones, para que el paciente vuelva a dar negativo al virus y acortar la duración de la enfermedad", dijo el profesor. “La capacidad antiviral y antiinflamatoria de la cloriquina podría tener una eficacia potencial para tratar pacientes afectados con neumonías provocada por el Covid-19”, declaró. El profesor Raoult fue autorizado a fines de febrero a comenzar ensayos clínicos en 24 pacientes con coronavirus Covid 9 en Francia con extraordinarios resultados. Fue invitado a ser miembro del comité de 11 especialistas asesores del presidente Emmanuel Macron. Los resultados se conocieron el 19 de marzo: los que han recibido Plaquenil (hidrocloroquinina) son portadores del virus a un 25 por ciento luego de seis días. Los que no fueron tratados con este medicamento son portadores del virus a un 90 por ciento luego de seis días. Raoult es un científico rebelde, con un áspero vinculo con laboratorios y la burocracia del estado que autoriza sus resultados. El ministro de salud francés dijo que debería ser experimentado a más amplia escala. Pero el infectólogo los desafía: ”Todo el mundo lo utilizará. No soy yo el bizarro, es la gente que es ignorante”, dijo el profesor Roualt al diario Le Parisien este lunes.“A partir de que nosotros hemos mostrado que el tratamiento es eficaz, yo encuentro inmoral no administrarlo. Es así de simple”, declaró el profesor Roualt. Frente a su instituto en la Costa Azul, docenas de franceses (al día de hoy miles) se han presentado estos días para ofrecerse como cobayos. “Yo soy un científico y reflexiono como un científico, con elementos verificables. Produzco más data en enfermedades infecciosas que nadie en el mundo. Soy un doctor, tengo 75 pacientes hospitalizados y 600 consultas por día. Las opiniones de una y otros me tienen sin cuidado. En mi equipo nosotros somos gente pragmática, no pájaros de la televisión”, alerta el profesor, con sus largos cabellos rubios hasta los hombros y no disimulada irreverencia. Para este infectólogo respetado mundialmente, “el problema de este país es que la gente que habla es de una ignorancia abismal. Yo hice un estudio científico sobre la cloroquina y el virus hace 13 años, que fue publicado. Después cuatro estudios más han mostrado que el coronavirus era sensible a la cloroquina. Todo esto no es una novedad. Que el círculo de decididores no esté informado del estado de la ciencia, es sofocante. La eficacia potencial del resultado de la cloroquina sobre los modelos de cultura viral los conocemos. Sabemos que es un antiviral eficaz”, advirtió. “Nosotros hemos decidido en nuestros experimentos ajustar un tratamiento de una azytromicina (un antibiótico contra la neumonía bacteriana) para evitar la sobreinfección”, explicó el infectólogo al diario Le Parisien en su edición del lunes en Francia. El profesor Roualt no quiere esperar: ”Nosotros creemos que hemos encontrado el tratamiento con nuestro equipo. Y sobre el plano de la ética médica, yo estimo no tener hoy el derecho -en tanto médico- de no utilizar el único tratamiento del que se han hecho pruebas. Yo estoy convencido que al final todo el mundo utilizara este tratamiento. Es solo una cuestión de tiempo antes que la gente deje de comerse su sombrero y diga: esto es lo que hay que hacer”, dijo. El profesor explicó que ellos han dado hidroxicloroquina a razón de 600 mgs. por día durante seis días, bajo la forma de Plaquenil, que es el nombre del medicamento, como comprimidos, tres veces por día. La azitromicina, a 250 mgs. , dos veces al día el primer día y una vez por día durante cinco días. “Cuando usted tiene un tratamiento que marcha contra cero que funciona, este es el tratamiento que debe ser la referencia. Esa es mi libertad de prescribir como médico. Nosotros no tenemos que obedecer al Estado para cuidar a los enfermos. Las recomendaciones de la Alta Autoridad de la Salud es una indicación pero no estamos obligados. Después de Hipócrates, los médicos hacemos lo mejor, en el estado de nuestro conocimiento y el estado de la ciencia”, argumentó el infectólogo francés para defender la inmediata aplicación del tratamiento. Para él, la Nivaquine, que es un derivado de la Cloroquina, es menos tóxico que el paracetamol o la aspirina a dosis fuerte. Siempre un medicamento debe ser recomendado por un generalista. En estas horas, el profesor Roualt está recibiendo llamados de todo el mundo -de la clínica Mayo al Massachussets General Hospital- para poner el tratamiento en marcha. Advierte que “el confinamiento es un experimento social que jamás se ha practicado en la edad moderna” y que no se sabe si funciona. ”Es una medida de improvisación social con efectos colaterales. ¿Qué pasará cuando la gente está encerrada entre 30 a 40 días?” se pregunta. A pesar de las declaraciones del científico, el Alto Consejo de la Salud de Francia hasta hoy recomienda no utilizar su tratamiento, salvo para casos graves y bajo vigilancia médica estricta. ¿UNA ESPERANZA?
Un experto argentino habla sobre el método del médico francés para vencer al Coronavirus: “Es un trabajo serio”
El infectólogo Dr. Lautaro De Vedia deja abierta una luz sobre la combinación de drogas que promueve Didier Raoult. 24/03/2020 - 14:23 Días de batalla. Días de fuego. El ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología, Dr. Lautaro De Vedia, atiende a Clarín y de inmediato dice estar esperanzado. Trabaja en el Hospital Muñiz donde tiene varios pacientes internados con Coronavirus que "evolucionan bien". Son jóvenes, explica, y el virus contraído por viajes a zonas afectadas o contactos estrechos se comporta de acuerdo con la bibliografía médica: sin provocar cuadros de gravedad. "Creo que las medidas tomadas van a hacer efecto. Siento que en términos de decisiones gubernamentales se hicieron las cosas bien. Había que tomar estas medidas", afirma el experto de años en todas las epidemias últimas que ha enfrentado la humanidad.
La pregunta siguiente, por lo tanto, tiene que ver con la noticia del día. Un médico francés, con ciertos visos de rebelde antisistema, está desafiando a la industria y a la ciencia: dice que tiene la cura contra el coronavirus. Se llama Didier Raoult, lleva el pelo largo, parece salido de una película sobre el futuro. Roualt es director del Instituto Mediterráneo de Infecciones, con base en Marsella, y el más eminente especialista mundial en enfermedades infecciosas transmisibles. Su receta se basa en una combinación de dos drogas: la antipalúdica hidroxicloroquina con el antibiótico azitromicina. La hidroxicloroquina es un derivado de la cloroquina. Es barato y se usa desde 1944 contra la malaria, un parásito transmitido por un mosquito. Se conoce bajo varios nombres comerciales según los países y fabricantes, como Nivaquine y Resochin. La azitromicina es más familiar todavía. Se suele suministrar para tratar cuadros de neumonía y otro tipo de virosis pulmonares, en tratamientos por lo general de 3 días, debido a que perdura por mucho tiempo en el organismo. La combinación de ambas drogas para tratar casos de coronavirus es perfectamente aplicable en la Argentina, de acuerdo con los expertos. Desde Francia, Raoult desafía: "Tengo la cura, que no la quieren ver es otra cosa". Desde Argentina, De Vedia mesura: "Es un trabajo serio y es una esperanza. Las dos drogas son usadas en la Argentina. La hidroxicloriquina es una droga muy vieja, que ha sido usada en paludismo y tiene acciones concretas contra el virus. Se ha demostrado su eficacia en tratamiento. Aunque todavía falta un gran estudio para afirmar que es la droga contra el coronavirus. La azitromicina desde luego que se usa. Son dos antibióticos que combinados son capaces de regular la actividad del sistema inmunológico. Son drogas modulares porque justamente modulan o regulan el sistema de defensas del cuerpo para que se defienda de manera más eficaz. “No es una novedad la combinación de ambas drogas. Es un tratamiento posible", dice De Vedia. ¿Efectos adversos? Ocurre como con todo, señala De Vedia: Según el tipo de paciente, se debe ver qué y cómo suministrar. "Pero es aplicable, eso es importante". Y suma: " De todos modos, como ustedes saben, la Sociedad Argentina de Infectología sigue recomendando el uso de antirretroviral en las neumonías graves ocasionadas por Coronavirus. No hay todavía un tratamiento definitivo. Sí, diferentes posibilidades para tratar casos específicos. Lo que este hombre propone en Francia es serio. Pero aún requiere de un estudio a gran escala. Sus resultados son sobre un grupo reducido de pacientes". EL USO DE LA CLOROQUINA Y LOS INTERESES EN JUEGO
Las razones detrás de las críticas al infectólogo francés que dice que encontró la cura para el coronavirus
Una batalla ideológica y científica, sumada a una pelea de larga data con referentes de la política sanitaria de Francia, pueden explicar los cuestionamientos a Didier Raoult. Clarín 29/03/2020 - 7:00 El conflicto entre el profesor Didier Raoult, el infectólogo francés de Marsella que descubrió que un tratamiento de cloroquina podría tratar a los enfermos del coronavirus, y la comunidad científica francesa, que discute sus ensayos, conmueve a todos y se preguntan las razones de esta batalla ideológica y científica.
Ha generado una grieta entre los que lo defienden y los médicos que lo atacan, aun cuando no existe hasta ahora un tratamiento aprobado para el COVID-19, en una rara y brutal guerra entre el sur de Francia contra París y los organismos de control de autorización de tratamientos. Una batalla de egos e intereses se desató, cuando miles de personas mueren en la pandemia. Reputado epidemiólogo, con muchos trabajos escritos, especialista en enfermedades infecciosas transmisibles, el profesor Didier Raoult es un científico diferente. Hijo de un médico militar, nacido en la colonia africana de Dakar, desde niño comenzó a estudiar la teoría de la evolución junto a su papá. Colecciona más de 3.000 virus, terminó el secundario después de haberse embarcado en un barco de carga y en la facultad de Marsella se caracterizó por ser el más rebelde, el más atípico y el más inteligente. Así lo recuerdan sus compañeros. Al terminar, se lanzó a la investigación de bacterias y virus. Al mismo tiempo encarna esa división que también existe en Italia, entre los del Norte y los del Sur del país. Las relaciones entre Raoult y el Consejo Científico, que asesora al presidente francés, siempre ha sido execrable. Pero la agencia de salud PACA, en el sur del país, respeta al genio rebelde. Inmediatamente decidió adoptar su tratamiento en los hospitales a sus órdenes, incluido Christian Strossi, alcalde de Niza, y afectado por el coronavirus, que indicó aplicarlo en toda su ciudad. Largas filas de personas que quieren atenderse en el centro de Marsella que dirige Didier Raoult.(AFP)En el 2010 el profesor Raoult recibió la subvención más elevada a la investigación médica en Francia. Con ella se lanzó a un proyecto único, que es su vida hoy: la creación del Instituto Mediterranée Infection, inaugurado en el 2016. Miles de marselleses hacen fila en su instituto para ser cobayos y salvarse del virus.
Con un ego tan sobredimensionado como su cabello rubio y hippie, el profesor es a veces víctima de sus propias pasiones, sin dejar de ser un gran científico. Así afirmó que la hidroxicloroquina era el remedio, conocido como Plaquenil y que era “inmoral” no aplicarlo. Lo probó sobre 24 pacientes y los científicos en París aseguraron que no fue suficientemente testeado en medio de la pandemia. El pegó un portazo al Consejo Científico: los acusó de no tener una estrategia en la epidemia. Al final el ministro de salud francés aceptó su tratamiento para hospitalizados solamente y comenzó a aplicarse masivamente en Francia. En otros lugares del mundo ya había comenzado antes y en Argentina también se está probando en pacientes. Una teoría conspirativa se lanzó en las redes sociales, denunciando un posible “escándalo de estado sobre la cloroquina”, la prudencia y resistencia del gobierno para aplicarla, los intereses de la ex ministra de salud y candidata a las elecciones municipales en París, Agnes Buzyn, y su marido Yves Levy, vinculado a la investigación y los laboratorios, y presente en la inauguración del laboratorio de alta seguridad P4, apoyado por Francia, en Wuhan, en China, el 23 de febrero del 2017. Lo único cierto es que siempre hubo una confrontación entre el profesor Didier Raoult y Yves Levy por el estatus del Instituto Mediterranée Infeccion, institución creada en el 2016 por Raoult. Históricamente ambos confrontaban sobre al estatus de este instituto hospitalario universitario, establecido en el 2010, junto con laboratorios públicos y privados “para ser lugares de excelencia científica”. Levy, patrón del Instituto Nacional de Investigación en Salud y Medicina (INSERM) entre 2014 y 2018, se oponía al estatus de fundación de estos institutos bajo la sigla IUH, que les permitía tomar decisiones rápidamente consultando únicamente su consejo de administración y no a los otros institutos partners, en el que el INSERM formaba parte. Cuando asumió la ministra de salud Agnés Buzyn, ex nuera de la ex ministra Simone Veil, su esposa y su colega de la investigación Fredérique Vidal anunciaron que los nuevos IUH no podrían tener el estatus de fundación, como lo quería Ives Lévy. Una decisión que desencadenó un conflicto de interés, con el profesor Raoult en la primera línea contra ellos. En enero de 2018, INSERM, que presidía Levy, le retira la “labelización” a Infection Mediterranée, bajo el argumento que era la recomendación de organizaciones científicas. Según INSERM , la decisión se basa en el débil número de investigadores de INSERM presente en los proyectos del instituto de Raoult. En octubre del 2018, INSERM decide retirarse como miembro fundador de IUH Mediterranée. Esta es la raíz del conflicto entre el profesor de Marsella, que considera que la barata cloroquina y el antibiótico azitromicina pueden servir para frenar esta pandemia, el INSERM, Levy y Buzyn. La entonces ministra Buzyn había considerado a la cloroquina “venenosa” en su clasificación. Sin embargo, el profesor Raoult considera que “después de seis días, el 70% de los pacientes tratados con hidroxicloroquina no tienen más carga viral en sus test rinofaríngeos”. “La hidroxicloroquina cuesta 10 céntimos el comprimido. Es seguro que los laboratorios que financian el INSERM buscan soluciones más costosas”, sugieren en las redes. La industria farmacéutica financia en un 7% a INSERM y el profesor Raoult recibió 50.000 euros de Sanofi en el 2015. El Dr. Raoult lleva más de 13 años estudiando los coronavirus. Ese medicamento es comercializado en Francia por Sanofi, bajo la forma de Plaquenil. Los 30 comprimidos cuestan 5 euros. El ensayo para ver los resultados de la cloroquina va a ser coordinado por el INSERM en el hospital Bichat de Paris, en la AP-HP de Lille, en Nantes, Estrasburgo y Lyon. París. Corresponsal CORONAVIRUS: FRANCIA AUTORIZÓ EL TRATAMIENTO EN BASE CLOROQUINA DEL INFECTÓLOGO DIDIER RAOULTLa Agencia de Medicamentos lo avaló, pero aclaró que es sólo para pacientes hospitalizados.
26/03/2020 - 16:30 Clarín.com El polémico tratamiento en base a la cloroquina del profesor e infectólogo francés Didier Raoult fue autorizado este jueves por el ministro de salud francés “para pacientes afectados por el coronavirus, solamente hospitalizados” y con un marco bien encuadrado.
Así lo hizo saber la Agencia de Medicamentos, que lo liberó para el tratamiento en ese marco. El profesor Raoult, que había dado un portazo al Consejo Científico que se oponía a él, agradeció al ministro de salud francés Olivier Veran “por su escucha”.El decreto se publicó el jueves encuadrando la utilización de la hidroxycloroquina y autorizando su tratamiento de Covid 19 "solo para los pacientes que están hospitalizados”. La hidroxycloroquina, un derivado del antipalúdico cloroquina, fue propuesta por el profesor Didier Raoult, uno de los infectólogos más respetados del mundo y director del Instituto Universitario Mediterranée Infection, para tratar a pacientes afectados con el virus. Para muchos de sus colegas faltaba validación científica del tratamiento. Pero en la urgencia sanitaria y con 15 hospitales aplicándolo ante la falta de otro tratamiento, fue aprobado en estas condiciones. Un decreto reglamentó la utilización del Plaquenil, como se llama el palúdico en Francia “para evitar los riesgos de ruptura de stock”, como sucede ya en varios países. El remedio se utiliza para los pacientes con lupus o con poliartritis reumática. El medicamento “no será utilizado y prescrito por los médicos fuera del hospital”. En el decreto se establece que “la hidroxycloroquina en asociación con el Lopinavir/ritonavir puede ser prescrito, entregado y administrado bajo la responsabilidad de un médico a los pacientes con Covid 19”. También se establece que “en los establecimientos de salud que lo tomen a cargo, para la continuidad del tratamiento si su estado lo permite y sobre autorización de su prescriptor inicial, a domicilio”. Si bien el decreto no establece la dosis, el profesor Didier Raoult explicó la definitiva posología del tratamiento. Son dados 600 mgs cada día. Es decir 200 mgs cada vez, tres veces al día, durante 10 días. A eso se suma la Azitromicina en comprimidos de 250 gramos. El primer día se toman dos comprimidos de ese antibiótico, con el que se trata de frenar la neumonía bacteriana, y después uno solo por día durante 5 días, según las últimas especificaciones del profesor al diario francés Le Parisien. En cada país los comprimidos contienen diferente cantidad de miligramos. Con su fuerte temperamento y enfrentado a muchos de los científicos franceses, el profesor Raoult se ha convertido en la estrella de esta crisis sanitaria. En un test sobre 24 pacientes con el nuevo virus ha conseguido curar al 75 por ciento en solo seis días. Un grupo de Facebook Didier Raoult versus Coronavirus cuenta con 200.000 inscriptos. El profesor informó que China, los Países Bajos, Irán, Bélgica, Italia en Lombardía, Nueva York, Corea e India ya están usando la hidroxycloroquina en diferentes dosis. El jefe de reanimación del hospital Raymond Poincaret en Hau Seinne, en las afueras de Paris, dijo que está usándolo con éxito y sin efectos colaterales. La decisión se adoptó cuando el virus avanza en la región parisina y hay 1.695 muertos en Francia, 365 en las últimas 24 horas. París. Corresponsalía. |